Tu cielo es mi cielo,
mi luna es tu luna,
las estrellas son nuestras,
compartimos el mismo sol,
excepto que vivimos en galaxias diferentes.
Verte de lejos y sentir lo mismo de siempre: amor. Mirarte y sentirme más enamorada que nunca. Pasar a verte en la noche y sentir que te amo más que nunca. Pensarte en la distancia, y saber que nunca sentirás lo mismo que yo. Soñarte con ganas de que se haga realidad.