Cuando te hablo, me enamoro, sonrío... cuando lo hago, no lo puedo evitar. Me haces reir, porque eso es lo que te gusta hacer. Y a mí me encanta que hagas reir a los demás, y me pregunto si eres verdadero, si esto no es un sueño. Se detiene el tiempo cuando estoy contigo, por favor, te pido, estemos juntos, hay algo diferente en ti que me hace desearte. Me haces reir más que cualquier persona un tan sólo una conversación.
Y a decir verdad, me sorprende lo bien que nos llevamos. La vez en que te vi, creí que nunca volvería a hacerlo. Creí que serías de aquel día y de ninguno otro. Pero no fue así, y me agrada. Es una hermosa noche cuando hablamos.
Es cuando te miro, que mi alma se calma, mi cuerpo se serena, aunque por fuera no lo demuestre tanto. Pero aún así, si no te lo hago entender del todo, es para ocultar mis sentimientos, aunque soy más obvia que bosina de avión.
Dime ahora, nene, si algo llega a suceder entre ambos, porque es una hermosa noche, mientras que buscamos la perfección del amor de dos almas enamoradas. Y puedo decir que esto es más grande que nosotros. Dime tus sueños, y yo te los diré. Eres como los colores del arcoiris. Algo más grande que nosotros...
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