Esperar años mientras que transcurren sin aquella alma que nos enamora... que pase el tiempo y aprendamos a esperar sin darnos cuenta, a tenerle paciencia por el amor que se le tiene... y a miles de kilómetros de distancia no lo podemos evitar, el pensar en aquella persona, por la cual sentimos que luchamos contra el tiempo pensando en ellas... cuando nos encontramos en el camino con ese ser, puede pasar tantas cosas. Como que se acuerden de nosotros pero vagamente, y no sientan lo mismo que nosotros, porque continuaron su camino... Me duele admitir que él ha hecho su vida como para recordar lo que una vez sentimos en aquella época.
Lo observo y me pregunto qué nos sucedió con el tiempo, lo dejé ir mientras que crecíamos y tomábamos nuestros caminos por separados, hasta llegar a vernos.
No importar más que revivir recuerdos.
Luchas por un amor sin tiempo, luchar sin saber más que amar. Soñar que sabes que él sigue allí, en aquel lugar, pero que sin esperarte, sabiendo que no sabe quién soy... no es fácil aceptar que no regresará.
Él lo es todo para mí. A veces, siento que estoy en el camino equivocado, pero luego, cuando pienso en ese amor, sé que no.
Es un pensamiento inevitable, el amor, enamorarse, querer saber cómo es. Creer en algo que nos sucede escasamente. No hay nada que nos supere ese sentimiento.
Se puede aprender tantas cosas, como a estar solo, y a saborear ese momento... Uno, a veces, sabe lo que quiere, y siempre lo pone en duda... mientras que luego, sabe que sin duda es lo que quiere para sí mismo.
Nadie es el mismo ser humano después de amar y ser amado inmensamente, hasta no más poder, que si cambia, lo hace para bien, para mejor....
Jamás dejo de pensar en aquella persona que me hace sentir tan bien a miles de kilómetros, cuando no lo sabe. No sabe lo que provoca en mí.
Lejos de todo aquello que me hace bien referido de él debo soltarlo. Pero no puedo evitarlo, porque esta vez, quise asegurarme de tenerlo presente en mi vida, pero vi cómo ella me gritaba que ya estaba en lo más alto del mar, con las olas... mientras que en esta tormenta yo seguía buscándolo.
Una vez lo busqué, porque lo que más necesitaba para respirar era verlo nuevamente... y ahora es cuando lo suelto y lo dejo ir como aquella pluma que dejé caer desde un árbol en aquel bosque, donde nos conocimos. Simplemente es parte de mi pasado, no puedo retenerlo en el presente, pasa a ser mi mayor recuerdo.
Siempre espero para verlo nuevamente, para sentirme más viva que otras veces sin él... Hay razonas que no logro comprender donde sólo el amor entiende, sólo a él lo quise de verdad, jamás pude amar o querer tanto a un hombre como a él, alguien que no fuese ni mi padre, ni mi hermano... sólo él.
Simplemente no logro recordar querer a alguien tanto como lo quise a este ser en carne y hueso, en secreto. Tan sólo no puedo dejar de amarlo... tal vez sea ese hecho.
Vivo, respiro sin él, preguntándome qué haría en mi lugar, qué me diría... tan sólo no logro comprender por qué no lo puedo dejar soltar su recuerdo. Espero enamorarme un día, comprender tantas cosas del amor, como para soltarlo sin desprenderlo de mi corazón.
Un corazón puede amar dos veces, pero olvidar jamás...
